La Guanábana tiene un peso de entre 2 y 4 kilos. Su cáscara es de color verde oscuro y está cubierta de espinas. Su pulpa blanca o ligeramente amarillenta es carnosa y con abundante jugo. En su interior tiene una gran cantidad de semillas negras.
No sólo su sabor es fascinante, la Guanábana, también es conocida como graviola o chirimoya brasileña y es uno de los más poderosos anticancerígenos que existen. Esto se debe a la alta concentración que posee esta fruta en acetogeninas, unas sustancias capaces de luchar contra el cáncer. El consumo de Guanábana, no tiene ninguno de los efectos secundarios de la quimio, como pueden ser náuseas, perdida de pelo y de peso, ni tampoco ataca al sistema inmunológico debilitándolo y provocando que nuestro organismo sea fácilmente atacado por enfermedades comunes, mientras tratamos de combatir el cáncer.
Las acetogeninas son capaces de inhibir selectivamente el crecimiento de las células cancerígenas e inhibir el crecimiento de las células del tumor. Además la Guanábana es antiséptica, antibacteriana, vasodilatadora, hipotensora y sedante. Es un remedio efectivo contra las infecciones por bacterias y hongos. Además brinda otros beneficios al organismo gracias a su rica composición nutricional. Posee vitaminas, minerales y aminoácidos esenciales para la salud. Elementos como fibra, potasio, calcio, hierro, vitamina A y C, riboflavina y niacina, entre otros. El zumo de la fruta madura es bueno para el hígado y tiene efecto diurético.
¡Y sólo tiene 65 calorías!
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